creado por José Ríos Mercado

Para los padres del Kindergarten la posibilidad de acompañar a sus hijos durante el aprendizaje en línea, además de constituirse en un gran reto, se ha convertido en una gran oportunidad para aprender, compartir y crecer en familia, puesto que han podido realizar de manera conjunta cada una de las actividades escolares y cumplir de esta forma con la programación establecida por nuestro colegio.

“Esta modalidad nos ha permitido conocer el proceso de desarrollo de nuestra hija. Si bien al principio no fue fácil porque debíamos ajustar horarios y rutinas, semanas después ya estábamos adaptados. Es muy importante que como padres estemos pendientes de los niños para que no se dispersen y ellos puedan desarrollar todas las actividades”, expresó la Familia Kramarski Otero de Prekínder 3.

Por su parte, la Familia Pinto Arrieta de Kinderkrippe 2, indicó que las rutinas establecidas en el hogar, desde que inició el aprendizaje en línea, son muy parecidas a las que su hija llevaba cuando estaba en el colegio. Para ellos, el cumplimiento de los horarios ha sido fundamental para que, tanto su hija y ellos como padres, atiendan y desarrollen óptimamente sus compromisos escolares y laborales.

“La emergencia sanitaria nos ha dejado muchas enseñanzas como seres humanos, como ciudadanos y como padres. Queremos destacar el desarrollo de las capacidades de adaptación y autonomía que ha tenido nuestra hija al realizar sus actividades, y la labor realizada por los profesores del colegio para el logro de los objetivos trazados”, manifestó la Familia De los Reyes Suárez de Kinderkrippe 3.

Poder comprender más a su hija es quizá lo que más valora la mamá de Kínder 4, Sandra Escudero. El tener un espacio para que ambas puedan encontrarse es una de los principales aprendizajes que les deja el período de aislamiento; así mismo, indicó que su hija le dice en todo momento que desea regresar pronto al colegio para volver a ver a sus amiguitos y así poder jugar con ellos como siempre lo ha hecho.