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Creado por: Annika Becker. Desde hace más de un mes, los colegios de Colombia y Alemania están cerrados y las clases se imparten virtualmente. Los estudiantes y los profesores están empezando a acostumbrarse a la nueva situación y están desarrollando nuevas formas de trabajo. ¿Pero qué hay de los practicantes?
Mis compañeros de estudios en Alemania tuvieron que interrumpir sus prácticas. Los colegios los enviaron a casa porque ya no consideraban que una práctica fuera significativa y factible en la situación actual. Los compañeros que estaban en los colegios alemanes de Italia, Francia, Inglaterra y Guatemala, ahora también están de vuelta en Alemania.
En el Colegio Alemán de Barranquilla fue diferente. La transición al Aula Virtual significó para nosotros como practicantes la transición a la práctica virtual. Tuvimos acceso a los equipos del Aula Virtual y a Microsoft Teams, y el último día de clases se nos permitió tomar prestado el material analógico necesario. Ahora trabajamos, como toda la comunidad escolar, desde casa.
Sin embargo, podemos seguir tomando las clases, participando y asumiendo gradualmente el control de las pequeñas unidades de enseñanza nosotros mismos. En lugar del salón de clases, tenemos ahora simplemente uno virtual. Incluso las conversaciones con nuestros supervisores y otros profesores no han cambiado en esencia, excepto que ahora sólo los vemos en la pantalla, les hacemos llamadas telefónicas o les escribimos.
Se han añadido otras tareas. Por ejemplo, debido a que la enseñanza en línea es tan nueva, todavía hay relativamente poco material adaptado para ésta. Por eso he creado un montón de quizlets, pruebas de Microsoft Forms, hojas de trabajo que coinciden e incluso un video de aprendizaje en las últimas semanas. Desde que trabajamos virtualmente, recibo también mucho más de las planeaciones y correcciones de los profesores. Lo que solía tener lugar en conversaciones en la sala de profesores o en conferencias de las que no oíamos hablar los practicantes, ahora se hace por escrito en Teams para que podamos leer.
La práctica en la enseñanza virtual es para mí una experiencia muy emocionante y valiosa. El colegio será mucho más digital en el futuro y ahora tengo la oportunidad de acumular experiencia práctica con ésta. Es particularmente interesante que a través de la introducción expontánea de la enseñanza virtual, se estén llevando a cabo al tiempo muchos experimentos y ensayos. Algunos métodos conocidos de la clase normal funcionan de la misma manera online, otros no funcionan en absoluto. Esto da lugar a muchas ideas creativas y nuevos caminos que benefician a los estudiantes y a nosotros los practicantes se nos permite estar allí y conocerlos.
No doy por sentado que en este tiempo haya practicantes en el Colegio Alemán de Barranquilla. Los ejemplos del principio muestran que se maneja de manera diferente en muchos colegios. Para los profesores, la situación actual implica mucho trabajo extra, además del estrés de la cuarentena. La enseñanza virtual es nueva y desconocida, y genera por lo tanto, también inseguridad. Sin embargo, a los profesores todavía los dejan que nos vigilen y se toman el tiempo para cuidarnos. Estoy muy agradecido con los profesores, especialmente con mis supervisores Janina Oechsle y Hannah Busch, por esto